La democracia sigue muriendo por la mano del sectarismo ideológico. El Tribunal Constitucional ha avalado que la ley de Violencia de Género establezca penas a estos delitos en razón del sexo del condenado: ser hombre es un agravante.
Se manda al garete el Artículo 14 de la Constitución, que reza textualmente: Los españoles son iguales ante la Ley, sin que pueda prevalecer discriminación alguna por razón de nacimiento, raza, sexo, religión, opinión o cualquier otra condición o circunstancia personal o social.
Se rompe un principio esencial de la democracia. La ideología, la maldita ideología, siempre sometiendo al sentido común a su albedrío en este extraño país.
jueves, 15 de mayo de 2008
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1 comentario:
Es triste pero cierto que las nuevas ideologías esta copando el panorama nacional y haciéndose eco en instituciones tales como el gobierno y dando lugar a nuevas leyes que como la que mencionas, esta fuera de toda lógica y que viola los derechos fundamentales.
Genesis
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